ELOGIO DE LA POLÍTICA

FESTINA LENTE

martes, 23 de marzo de 2010

¿ESTÁ DESORIENTADO EL SR. CONSEJERO DE EDUCACIÓN?

Eso parece si nos atenemos a la errática política que sigue su Consejería respecto a la orientación escolar para desasosiego de profesionales, padres y alumnos. Este desnorte viene de antiguo y tiene su origen en que se minusvalora su importancia; se olvida que cuando hablamos de educación, hablamos no sólo de instrucción, de aprendizajes, de competencias básicas; hablamos sobre todo de personas de entre 3 y 18 años y de sus familias. Cada alumno con su carácter, su ritmo de desarrollo, sus intereses, problemas y necesidades (a veces especiales).

Para este fin humanizador y para intentar adecuar la enseñanza a las peculiaridades de cada uno nacieron los departamentos de orientación en los IES (secundaria y enseñanza post-obligatoria) y los equipos de orientación. Estos últimos están formados por profesores de Secundaria de la especialidad de Psicología y Pedagogía y por profesores técnicos de Servicios a la Comunidad y atienden a los alumnos de los centros de Educación Infantil y Primaria, acudiendo a estos centros en días asignados y con un horario marcado y fijo. Y últimamente haciendo malabarismos para poder atender adecuadamente a la población escolar porque la administración no cubre suficientemente las plazas..


Los equipos de orientación son estructuras con un director y desempeñan su trabajo en y para los centros .Pues bien, desde hace años y de manera recurrente aparecen confusas noticias sobre el futuro de estos equipos ya que el Sr. Consejero de Educación considera que necesita un nuevo modelo para atender a la población escolar y , en paralelo, los directores, al igual que el resto de profesionales que los componen, han visto cómo paulatina pero implacablemente, son los asesores del Sr. Consejero quienes realizan funciones de orientación desde los despachos, invitándoles (cuando no son ellos quienes lo hacen directamente) a cambiar decisiones técnicas sobre los alumnos.En fin, un lio molesto. Pero hagamos memoria y repasemos la historia que siempre arroja luz y permite analizar mejor los acontecimientos.

Alrededor de 1987 se crean los SAPOES en determinados centros públicos y concertados, profesores de psicología y pedagogía, en un caso funcionarios y en otro contratado por pago delegado, que a tiempo completo en los centros desempeñaban las funciones propias de la orientación, mientras los equipos seguían desarrollando su labor en el resto de centros... Esta experiencia se suprimió, sin evaluar y sin saber por qué.En el año 2004, a través de la entonces Directora General se anuncia un modelo de orientación. No se llevó a cabo ¿Avatares de la política, económicos, de otra índole? Desde luego no educativos.En el curso 2007 se crean , de manera experimental, unidades de orientación en determinados centros públicos. Es decir, lo mismo que aquellos SAPOES que habíamos dejado allá por 1987. En estas unidades están a tiempo completo, profesores de la especialidad de psicología y pedagogía Esta experiencia es, dice el Sr. Consejero, lo que quieren las familias, lo que quieren los centros y lo que quiere él.En el curso 2008/09, se presenta otro modelo por el Director General de turno. Tampoco fue posible,

Y llegamos al curso 2009/10, ¿hay un nuevo modelo?. No, hay dos (mal llamados) modelos : el que quiere el Sr. Consejero, el bueno, por el que se suprimen los equipos y los orientadores se recolocarían en los centros de Infantil y Primaria y otro, que no le gusta, pero ¡eureka! descubre que le cuesta menos dinero, y que consiste en suprimir también los equipos y que esos señores que andan por ahí desperdigados vayan a los departamentos de orientación de los IES y desde allí se desplacen a los centros de Infantil y Primaria, ¡ah! y las unidades de orientación, aquellas que todos querían, en las cuales estaban tan contentos hasta los profesionales, desaparecen.

Todo esto se resume en lo siguiente: aquellos de los que hablábamos al principio, esas personas de 3, 6, 12… años y sus familias recibirán aquello que el dinero y los fantasmas del Sr. Consejero permitan, porque no son los protagonistas.
Los mal llamados modelos son única y exclusivamente las ganas de hacer desaparecer una estructura que por alguna extraña razón levanta ampollas en el Sr. Iglesias Riopedre.
¿No será bueno recordarle que en tiempos de tribulaciones mejor no hacer mudanza?
También se le puede decir que no puede dar gato por liebre. El Consejero debería destapar sus cartas y jugar limpio; y dejar a unos profesionales trabajar, que como en todos los grupos humanos, incluso entre los consejeros, los habrá malos, regulares y buenos pero seguro que en la mayoría de los casos se preocupan por actuar con profesionalidad y sobre todo con respeto a los niños y que además quieren trabajar, si les dejan.
¿No será mejor pensar en esos niños que este curso no por uno u otro modelo de orientación, sino por una cuestión más espuria (dinero) van a ver cómo se les orienta no por las necesidades que tengan sino por la necesidad de no generar más recursos?.
¿Van a tener mejor respuesta las necesidades pasando de un modelo a otro sin evaluar nada, apostando hoy por algo que mañana o a la semana siguiente o al curso siguiente ya no sirve?
En cabeza propia habrá aprendido que las críticas no siempre son justas, son más bien fruto de distintos puntos de vista e intereses. Al menos, esto es lo que el Sr. Consejero les dice a los sindicatos, véanse sus afirmaciones a tenor de las reclamaciones sobre una oferta pública más amplia. Siempre lo que es diferente es visto con recelo y genera controversias y en algunos casos algo más, pero eso no son razones objetivas ni por calidad educativa para realizar modificaciones.
Pensemos entre todos cómo ayudar mejor a los niños y a las familias y sacudámonos los fantasmas que bastante tenemos con la realidad.