ELOGIO DE LA POLÍTICA

FESTINA LENTE

martes, 23 de noviembre de 2010

Educación en tiempo de espera

Desde la Fundación Entreculturas y el Servicio Jesuita a Refugiados (SJR o JRS en sus siglas en inglés) se ha querido publicar este informe titulado Educación en tiempo de espera. Un derecho vulnerado para millones de personas refugiadas y desplazadas, con el objetivo de dar voz a las poblaciones refugiadas y aproximarnos a las experiencias que viven. La Fundación Entreculturas tiene como misión optar por la solidaridad hacia los más desfavorecidos y promover la educación como instrumento de cambio social y promoción de la justicia. Desde sus inicios ha tomado conciencia de la vulnerabilidad de las poblaciones desplazadas y ha asumido el trabajo del SJR como referencia en los servicios de asistencia a estas poblaciones. Año: 2010

Un grupo de vecinos interpone una demanda contra las futuras torres del área de Roces

El colectivo sostiene ante el Tribunal Superior de Justicia que «no está justificado» el cambio que permite edificios de 26 plantas donde estaban previstos de diez


La protesta vecinal contra las cuatro torres previstas en el área residencial de Roces ha llegado a los juzgados. Futuros residentes de este nuevo barrio gijonés, que se han constituido en plataforma para defender sus intereses, acaban de interponer una demanda formal ante el Tribunal Superior de Justicia de Asturias. Argumentan que el proyecto «no está justificado ni técnica ni jurídicamente».

La llamada Plataforma Roces Residencial Sostenible da así un paso más en la protesta que emprendió hace dos años, cuando se dio a conocer la iniciativa. Las torres introducen un cambio en el diseño de la urbanización de 3.700 viviendas que se está desarrollando al otro lado de la Ronda Sur. La entrada y la salida de esta nueva zona residencial aparecían enmarcadas, en los planos aprobados inicialmente, por sendos edificios de diez plantas, los dos con forma de arco. En su lugar, se levantarán cuatro bloques de 26 plantas cada uno.

Los vecinos que se sienten afectados por esta modificación urbanística acuden a los tribunales después de haber denunciado el asunto por vía administrativa ante diferentes instituciones. La plataforma incluso puso en marcha una campaña de recogida de firmas para tratar de recabar apoyos. Cuando la Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio de Asturias (CUOTA) autorizó la construcción de las cuatro torres, el colectivo presentó un recurso contra su resolución.

La pasada semana, los argumentos de ese recurso se trasladaban al Tribunal Superior de Justicia de Asturias ya como demanda. El pleito enfrenta a la plataforma de Roces con la CUOTA y, por extensión, con la concejalía de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio e Infraestructuras. Pero también con el Ayuntamiento de Gijón; Sogepsa, la sociedad mixta que ha gestionado la creación del área residencial de Roces, y las tres empresas constructoras que promueven las polémicas torres.

Su proyecto se presentó públicamente en la Universidad Laboral con la presencia de autoridades locales y autonómicas. Justifican la nueva propuesta edificatoria alegando que «las puertas» previstas en el diseño original generan problemas de sombras.

Los hechos 

-Hace dos años, el Ayuntamiento y el Principado empiezan a tramitar un cambio de diseño en el área de Roces que implica construir cuatro torres de 26 plantas donde estaban previstos dos edificios de diez. Las constructores que lo solicitan alegan problemas de sombras.

-Los futuros vecinos del área residencial se constituyen en plataforma para evitar esta modificación urbanística. Su lucha llegaba la semana pasada al Tribunal Superior de Justicia de Asturias en forma de demanda. Aseguran que se les va a entregar un barrio distinto al que les vendieron inicialmente.
 
Los integrantes de la Plataforma Roces Residencial Sostenible advierten de que «se nos va a entregar un barrio muy distinto del que nos vendieron». Diferencia que atribuyen únicamente a las torres previstas en los extremos de la urbanización. «Nos sentimos engañados», señalan los futuros vecinos de un barrio que «nos presentaron como espacio de transición entre la ciudad y la zona rural».

Las futuras torres de Roces levantarán 97 metros del suelo, lo que en opinión de la plataforma causará «un gran impacto» en el entorno. «Meterán cuatro edificios como el de Bankunión en la zona rural», lamentan. Los promotores de los edificios, sin embargo, aseguran que su diseño será de vanguardia y convertirá el área de Roces en un hito arquitectónico de la ciudad. Para mostrarlo, organizaron una presentación pública en la Universidad Laboral a la que asistieron autoridades autonómicas y locales.

«Esta modificación no la mueve el general, sino el interés privado de unos constructores que no quieren sombras en sus pisos», reprocha la plataforma. El Principado y el Ayuntamiento, a través de Sogepsa, impulsaron la operación de Roces para poner en el mercado vivienda asequible. El 82 por ciento de los pisos, de hecho, está acogido a algún tipo de protección. Las torres figuran entre las pocas edificaciones que saldrán al mercado a precio libre y su sus solares -lotes 1 y 12- se ubican, además, en los puntos más estratégicos de la urbanización.

El falso estirón del Patronato

En tiempos de restas y signos negativos, el presupuesto del Patronato Deportivo Municipal para el año que viene se coloca a la cabeza del ranking presupuestario de empresas y entidades municipales, con una asignación de 10,68 millones de euros, que supone un incremento del 16,72% con respecto a los dineros que ahora mismo maneja la entidad que preside el concejal socialista José Ramón Tuero. Todo un estirón cuantitativo cuando el resto de sus hermanas y hermanos del entramado municipal tienen que ajustarse el cinturón y asumir rebajas que rondan, incluso, el 30% del presupuesto en vigor.

Pero la subida tiene truco. No se trata de un dinero para afrontar nuevos equipamientos, más subvenciones a clubes o ampliaciones en los programas de fomento deportivo. Son, simplemente, ajustes contables en el capítulo IV (transferencias corrientes) del presupuesto. Entre estos ajustes está el hecho de que ahora computan en las cuentas del Patronato una serie de subvenciones nominativas a entidades deportivas que hasta el momento venían reflejadas en el presupuesto municipal. Además, y ante la previsión de que se acaba el año en curso con el presupuesto muy ajustado, ya se han cuantificado más de 300.000 euros para premios en el Concurso de Saltos Internacional Oficial. Otros años, ese dinero se sumaba a posteriori a través de una modificación que incorporaba al presupuesto inicial los remanentes del año anterior. Otro poquito de esa subida tiene que ver con la obligación del Patronato de hacerse cargo del mantenimiento de dos nuevos equipamientos: la piscina de La Camocha y el pabellón de Ceares.

Suerte, aunque mucha menos, han tenido también los responsables del teatro Jovellanos y la Empresa Municipal de Servicios de Medio Ambiente Urbano (Emulsa), que han visto cómo sus presupuestos suben, respectivamente, un 1,04 y un 0,90%.

Ni frío ni calor en la Fundación de Servicios Sociales que repite presupuesto. Sus cambios no están en la cifra final -13,69 millones- sino en el reparto interno de ese dinero. La entidad ha reducido al máximo sus gastos de personal para trasladar ese dinero a programas que tienen una incidencia directa sobre las familias gijonesas a través de ayudas y subvenciones.

El resto de los presidentes de los consejos de administración de las empresas municipales han visto como un signo negativo se colocaba delante de la partida económica con la que moverse el año que viene. Casi todas las reducciones están vinculadas al capítulo de inversiones para poder garantizar a través del presupuesto corriente el mantenimiento de la estructura de cada entidad. Por debajo del 2% están las reducciones de los presupuestos del Centro de Transportes, la Empresa de Aguas y la Empresa de Transportes, y por debajo del 10% se computan los descensos en el Jardín Botánico, la Fundación de Cultura y el Centro de Empresas. ¿Quién se lleva la peor parte? La Sociedad de Turismo (-11,50%), Cementerios de Gijón (-12,39) y la Empresa de la Vivienda (-27%). Una rebaja que tiene que ver con el descenso inversor de la entidad una vez terminada su labor de promoción de vivienda con la construcción de un bloque en La Camocha. La empresa de Francisco Santianes centra en el reparto de subvenciones al alquiler de vivienda su estrategia política y social para el año que viene.