ELOGIO DE LA POLÍTICA

FESTINA LENTE

domingo, 24 de octubre de 2010

Casi 2.300 gijoneses a la espera del salario social

Cerca de 2.300 gijoneses esperan por el salario social. Hasta el 19 de octubre pasado, los centros sociales de la ciudad habían recogido 764 solicitudes de otras tantas personas que aspiran a cobrar la renta mínima, la que el Gobierno regional paga a quienes ingresan menos de 530 euros al mes. Según las estadísticas, tras cada petición se esconde, de media, la necesidad de familias de entre dos y tres miembros. Es decir, la necesidad aprieta a casi 2.300 personas.
Y, de momento, la respuesta que han obtenido ha llegado en forma de ayudas de emergencia y becas de comedor, puesto que la demora de tramitación de esta paga, de la que Asturias fue pionera en poner en marcha, supera ya los siete meses. La Fundación Municipal de Servicios Sociales ha visto como, a pesar de que la demanda del salario social se reducía a la mitad sobre el año pasado -cuando se alcanzaron cifras históricas de 1.661 peticiones en diez meses-, sus propias subvenciones se disparaban hasta un 23%. Porque la necesidad no puede esperar.

La Red Asturiana de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social fue la última en dar la alarma. El pasado día 17, con motivo del Día Internacional por la Inclusión, anunció que «son muchas las familias pendientes del salario social, que lleva siete meses de retraso en su tramitación. Mientras esperan, ellos y ellas no tienen nada. Viven al día».
El ente que reúne a veintún organizaciones no gubernamentales -Accem, Albergue Covadonga, Alambique, Albéniz, Proyecto Hombre, Asturias Acoge, Cáritas, Colegio Oficial de Trabajo Social, El Prial, Emaús, Amaranta, Edes, Secretariado Gitano, Siloé, Manos Extendidas, Movimiento Asturiano por la Paz, Unga, Xurtir, CISE, Vitae Siglo XXII y el sindicato UGT- ha vuelto a poner sobre la mesa los problemas de una paga, la renta básica, de la que Asturias es una de las pocas en disponer de ella y de la que Gijón es la ciudad con mayor volumen de peticiones.
A pesar de que las organizaciones sociales reconocen que la cobertura social en el Principado es «superior a la media nacional», hasta el punto de que triplica a la madrileña, lo cierto es que la renta mínima sigue arrastrando problemas de tramitación y, también, de ejecución.
4 de cada 10, de por vida
Pocos son los beneficiarios que, una vez sido aprobada la paga, ponen en marcha el Programa Personalizado de Incorporación Social (PPIS). En Gijón, 4 de cada 10 beneficiarios están exonerados de hacerlo porque o son mayores o su estado de salud les coloca ya fuera del mercado laboral.
Pero, para los colectivos sociales ese problema, el de la falta de planes individuales -pendientes aún de que el Consejo Consultivo dé el visto bueno a un Reglamento que la Consejería de Bienestar Social y Vivienda ya terminó hace año y medio- es menor «comparado con el retraso». En Gijón, algunas trabajadoras sociales dan datos alarmantes. «Hay personas con la solicitud pendiente desde el año pasado», aunque las organizaciones sociales carecen de estadísticas rigurosas que certifiquen un parón de esas características «porque, también aquí, a veces, hay picaresca».
La demora en la gestión que sí reconoce el departamento que dirige Noemí Martín es la de los siete meses, un atasco que la consejería ha argumentado en la falta de personal. Al margen del calendario, lo que todos reconocen es que el atasco tiene implicación directa en la villa de Jovellanos, donde casi 2.300 personas están a la espera de la respuesta oficial y viven, mientras tanto, de las ayudas municipales.
Así lo ha constatado la Fundación Municipal de Servicios Sociales, que ha visto cómo, pese a la buena noticia de que la demanda del salario bajó un 54% respecto al año pasado, las peticiones de ayuda de emergencia, las que se conceden cuando no hay otro recurso en marcha, han aumentado un 5%.
Mucho más alto es el porcentaje de crecimiento de las becas de comedor, cuyas solicitudes globales han crecido un 10% en sólo un curso, con un pico mucho más elevado si se atienden a las modalidades: la completa crece un 23%.
«La crisis sigue ahí»
La presidenta de la Fundación Municipal de Servicios Sociales, Esperanza Fernández Puerta, es la encargada de poner voz a las cifras, ya que sus estadísticas le dejan claro que «la crisis sigue estando ahí, pero las peticiones del salario social han bajado. Sin embargo, no lo han hecho las demandas de ayudas de emergencia».
Las estadísticas mencionadas indican que hasta el 19 de octubre pasado, 764 gijoneses habían presentado en los centros municipales la petición para recibir esta paga. Un año antes, por esas mismas fechas eran 1.661 los gijoneses que se habían visto obligados a acudir ante un mostrador para dar ese paso.
No obstante, la alegría ante lo positivo del descenso se esfuma en cuanto se abre el plano histórico: 2009 fue el año del récord absoluto de peticiones de la renta mínima, cuando en Asturias se superaron los 17.000 beneficiarios, tras golpear con dureza la crisis económica.
Además, aunque 764 casos puedan parecer pocos, frente a los 1.661 del año pasado, lo cierto es que ya superan a los expedientes registrados en todo 2008. Hace dos años, fueron 665 los casos de expedientes de salario social tramitados. Es decir, un 15% menos que en diez meses de 2010. Si la mirada se deja volar hasta 2007, la situación no mejora mucho. Hace tres años, fueron 636 los expedientes surgidos durante los 12 meses. Lo que es lo mismo, un 20% menos que entre el 1 de enero y el 19 de octubre de este año.
Es decir que, como reconoce la concejala socialista «la crisis sigue ahí», sobre todo porque el atasco en la gestión de la renta mínima no le ha permitido desahogar el departamento de ayudas de emergencia, saturado de peticiones.
El centro, en abril
La estadística de la Fundación Municipal de Servicios Sociales no sólo permite conocer las necesidades de las familias gijonesas, sino, también, dibujarles un perfil e, incluso, situarlas tanto en el plano como en el calendario: la zona centro y abril.
En el primer aspecto, el personal, la crisis ha rejuvenecido la lista de demandantes de salario social. Aunque sigue formada igualmente por mujeres, con familiares a su cargo, las edades han bajado al grupo población de entre 35 y 40 años.
En cuanto a su domicilio, todo apunta a la zona centro. El centro de servicios sociales ubicado en el corazón de la ciudad, también sede de la Fundación, es el que más peticiones lleva acumuladas desde enero hasta el 19 de octubre. De los 764 expedientes abiertos en Gijón, 160 lo hicieron las trabajadoras sociales de la Gota de Leche, una cifra que se sitúa muy por encima del otro centro municipal con más demanda: el de Gijón-Sur.
En esa zona de la ciudad, que engloba el alto Pumarín y Nuevo Gijón, se presentaron 133 peticiones, en un ranking de peticiones que cierran, con idéntico número, La Calzada y El Llano, donde las familias que llamaron a la puerta de la renta mínima fueron 119. El barrio con menos vecinos que necesiten el salario social es La Arena, con 55 casos.
Por meses, a falta de cerrar los datos de octubre, el peor fue el de abril, cuando en toda la ciudad se sumaron 105 casos más. Marzo y mayo le siguieron de cerca, rondando el centenar de expedientes, con 95 y 97 peticiones, cada uno.
El mensaje de la concejala socialista, no obstante, es optimista, porque también los datos permiten ver el vaso medio lleno. No sólo la demanda ha bajado un 54% respecto a 2009, sino que la tendencia de los últimos meses ha ido a la baja. De hecho, en los 19 días de octubre contabilizados sólo se presentaron 17 propuestas.

Los arquitectos piden repartir más la vivienda protegida y recuperar el tranvía

El Colegio Oficial de Arquitectos de Asturias ha presentado unas completas alegaciones al Plan General de Ordenación que, partiendo de la base de compartir «los objetivos ya determinados por la Corporación», hacen toda una serie de propuestas muy concretas. Entre ellas, mejorar el reparto de la vivienda protegida en la ciudad, o recuperar medios de transporte alternativos, como el tranvía, «en nuevos ámbitos en los que sea viable y asequible económicamente». Los profesionales, que durante el periodo de información pública mantuvieron una reunión con el concejal de Urbanismo, hacen una primera valoración, que debería servir de base a todo lo demás: analizar los datos de vivienda de 2005 a 2009, y no de toda la década, porque son «más realistas».
A partir de ahí comienzan las iniciativas concretas. En cuanto a vivienda protegida, si bien Pedro Sanjurjo ha insistido una y otra vez en que más de un 30% de las 21.000 nuevas viviendas previstas en el PGO serán de protección, los arquitectos hacen hincapié en la necesidad de repartir estos pisos en todos los ámbitos. Así, proponen establecer un porcentaje mínimo de reserva en todos los nuevos ámbitos, que podría ser de entre un 5% y un 10%, «sin que este porcentaje deba ser idéntico en todos ellos». Es decir, puede haber actuaciones con un 5% de pisos protegidos, y otras con el 40%. Todo, para «evitar la concentración en un determinado ámbito destinado prácticamente en su totalidad a vivienda protegida, con el fin de fomentar la diversidad y facilitar la cohesión social y el equilibrio territorial».
Solicitan también los arquitectos un plan especial para «el frente marítimo en la zona de astilleros» y proponen «la ordenación de este ámbito de forma conjunta y coherente, incluyendo la continuidad de los espacios libres públicos del borde costero». Y en cuanto a otra fachada marítima, la de la Ería, cuestionan los profesionales parte de los planes municipales: «Que se estudien y analicen de forma más profunda los efectos que se pueden generar si se toma una postura demasiado radical a favor de la peatonalización de determinadas zonas (intención de peatonalizar desde el puente del Piles hasta El Rinconín)».
Los caminos de Porceyo
Esta última propuesta forma parte de un largo listado de cuestiones relacionadas con el diseño de una ciudad sostenible, en las que se habla de edificaciones energéticamente autosuficientes, de aprovechar las áreas ya construidas y reservar al máximo el consumo del territorio, de regenerar el tejido urbano... En este sentido, los arquitectos piden actuaciones que no sólo se centren en reformar edificios, sino que sean «operaciones de reestructuración y recuperación del tejido urbano», en áreas «con edificios al límite de su vida útil». Un ejemplo: «El Roces antiguo, barrio de baja o media densidad que bien admitiría una operación de rehabilitación interior a fin de fijar la población».
En cuanto a la movilidad, varias cuestiones a tener en cuenta. Para empezar, los peatones y sus problemas, como la «fractura que supone la ronda exterior y la problemática que puede surgir en materia de comunicaciones entre Nuevo Roces y el centro urbano». O Porceyo, donde sólo se cuenta con caminos preexistentes «y un único medio público de transporte».
El Colegio Oficial plantea en este punto «aprovechar la existencia del trazado de Feve como viario estructurante» y «plantear sistemas de transporte público alternativos y que contribuyan a la reducción de emisiones, tales como el tranvía, en nuevos ámbitos en los que sea viable y asequible económicamente».
Estas son las principales propuestas realizadas por el grupo de trabajo de Urbanismo del Colegio Oficial de Arquitectos, una de las 1.436 alegaciones presentadas al PGO.

El sistema educativo español o el 'modelo Bob Esponja'

@Esteban Hernández.- 24/10/2010 (06:00h)
“Durante siglos hemos sido un país de ingeniosos, que confiábamos más en las buenas ocurrencias que en el trabajo concienzudo. Por eso no acabamos de creernos que nuestro futuro va a depender de la educación”. Lo que subraya José Antonio Marina, filósofo y autor de La educación del talento (ed. Ariel) es parte de una situación compleja y contradictoria, ya que ese extendido consenso acerca de la importancia de la educación para nuestro futuro como país no parece trasladarse a hechos: la educación importa a todo el mundo, pero casi nadie se la toma en serio.

Como señala Nieves Segovia, presidenta de la Institución Educativa SEK, algo serio está pasando “cuando aceptamos niveles de fracaso escolar que no se toleran en otros sectores”. Ante estas circunstancias, la sociedad civil apenas se manifiesta, como si fuese algo de lo que no le compete debatir. “Y no es así en absoluto: estamos ante un modelo caduco que tenemos que tratar de resolver desde un plano distinto y la sociedad civil ha de tener un papel prioritario a la hora de instigar estos cambios”.

Adecuar el sistema educativo a las necesidades de los tiempos, debe ser un objetivo prioritario, según Segovia. Y más aún en España, asegura Carlos Barrabés, presidente de Barrabés Internet, ya que nuestro modelo no es ya el de Peter Pan, el de los niños que se negaban a crecer, “sino el de Bob Esponja: un tipo que hace hamburguesas, que trabaja como un loco y que tiene un jefe que es idiota”.

Barrabés realizó estas declaraciones en el marco del Global Education Forum, un encuentro organizado por Fundación SEK, Institución educativa SEK y la Universidad Camilo José Cela, que se celebró los días 15 y 16 de octubre, y cuyo objetivo era indagar en las tendencias del futuro educativo. Algo esencial, asegura Segovia, toda vez que “hasta ahora no hemos hecho más que dar vueltas concéntricas, señalando las mismas soluciones a los mismos problemas. Nuestra tarea debe ser la de romper ese círculo, examinando los avances que se están produciendo en medicina, psicología y sociología para ver qué nuevas soluciones podemos encontrar”.

Para Marina, fundador de la Universidad de Padres, si queremos pensar la educación del futuro deberemos tener en cuenta dos pautas. La primera es la escuela, que ha de hacerse más flexible y abierta a la sociedad, logrando que más gente se implique en ella, y que debe fijar muy claramente sus metas, diciéndonos qué tipo de ciudadano quiere formar. La segunda es la pedagogía, ámbito en el que se están produciendo desarrollos importantes. Así, “tendremos que aprovechar los descubrimientos de la neurociencia, ya que el conocimiento del cerebro nos brindará mejores instrumentos para la educación. Hemos de desarrollar también las posibilidades que nos ofrece nuestro mejor entendimiento del mundo emocional, así como la capacidad de innovación que nos proporcionan las nuevas tecnologías”.

Jóvenes más interactivos

En este sentido, señala Segovia, es básico que comprendamos que nuestro sistema pedagógico no puede ser el industrial, “ese sistema tipo fábrica, con inspección al final del proceso”, ya que las personas que estamos preparando no están destinadas al viejo modelo productivo. “Hemos de tener en cuenta las características de nuestros alumnos, hablar su mismo lenguaje y utilizar sus mismos canales. En este terreno la tecnología es importante, porque nos permite llegar a ellos utilizando su canal y su código”. Para Segovia, si nos dirigimos a ellos a través de canales que no entienden, sólo conseguiremos desmotivarles. “Tenemos que adaptarnos a las nuevas identidades de los jóvenes, que son más interactivos, más globales y que están cerebralmente mucho más preparados para el aprendizaje. Los padres nos criamos en la era de la televisión, nuestros hijos en la de la interacción, por lo que hemos de utilizar herramientas distintas”.

Para Marina, una de las claves del futuro educativo reside en saber aprovechar la ciencia de la inteligencia compartida, esa que surge de la interacción entre las personas. Una de las iniciativas más interesantes en este terreno es la de las asset building communities, “ciudades que han diseñado proyectos educativos muy bien organizados y que están resolviendo problemas que nos parecen endémicos, como el botellón, las peleas o la drogadicción, a través de la sinergia con todos los agentes sociales que poseen influencia educativa, como las organizaciones comunitarias, las escolares, las iglesias, los sindicatos y los medios de comunicación”. Para Marina, esta escuela en contexto, que será la del futuro, resulta imprescindible para “recuperar la vinculación social por medio de la cooperación, la responsabilidad, el respeto por la autoridad, la moral, la participación en proyectos colectivos, los valores del civismo, el respeto a los mayores y el esfuerzo para alcanzar metas valiosas”.

Cita como ejemplo The Harlem Project, uno de los experimentos sociales más relevantes de Norteamérica. Es un proyecto educativo-preventivo que atiende a 8.600 niños que viven en un área de sesenta manzanas del barrio de Harlem (Nueva York). Más de la mitad de estos niños viven por debajo del umbral de la pobreza y tres cuartas partes están por debajo de la media de su edad en cuanto a rendimiento académico. “En esta ciudad preventiva, denominada Harlem Children´s Zone, se llevan a cabo veinte programas a cargo de 650 profesionales, que siguen a los niños desde que nacen hasta que cumplen 18 años, y se ocupan de su educación, de los servicios sociales y de la atención sanitaria. Todas las actividades son completamente gratuitas, se financian mediante patrocinadores privados y apoyo estatal”.

Otras experiencias relevantes, afirma Marina tuvieron lugar en Bogotá, Medellín, y Buenos Aires, “probablemente el ejemplo más completo que se ha hecho de ciudades preventivas”. En España se han realizado algunos ensayos de prevención ciudadana, en Carmona (Sevilla), Arona (Tenerife), Almonte (Huelva), San Adrián del Besós (Barcelona), Ribeira (La Coruña).

Los modelos japonés, americano y finlandés

En el ámbito educativo-curricular también hemos de fijarnos en los planteamientos a nivel macro que se llevaron a cabo en Estados Unidos, para recuperar el liderazgo tecnológico, en Finlandia, para convertir una nación pobre en una potencia tecnológica y en Japón, para alcanzar una creación continua de conocimientos. El modelo americano “se propuso fomentar la creatividad científica desde primaria hasta la universidad, investigando en los métodos precisos para educar la creatividad. Y dio buen resultado, en especial en las universidades. Se impuso una educación basada en el estudio de casos, es decir, muy cercana la práctica. No se va desde la teoría a la práctica –como se hace en España con malos resultados- sino que desde el enfrentamiento con problemas reales se va hacia la teoría que debe resolverlos”.

El modelo finlandés pudo realizarse “gracias al acuerdo de todos los agentes sociales acerca del modelo de globalización que querían para su país, uno de cuyos elementos fundamentales fue la educación. Dieron máxima prioridad a la formación de profesores, y al prestigio de la profesión, y se propusieron detectar cualquier fracaso educativo en sus inicios e intentar remediarlo inmediatamente”. Japón, por el contrario, puso todo el énfasis en la adquisición de conocimientos, “insistiendo en el trabajo duro del alumno, bajo la presión de los padres. Tiene muchas horas de clase, y han tenido algunos problemas por la excesiva exigencia. La industria tiene muy claro que crear conocimiento es necesario para sobrevivir y cuida mucho el estímulo para los equipos de investigación”.

Pero más allá del camino que escojamos, asegura Segovia, lo que sabemos del futuro es que deberemos desarrollar nuevas habilidades para adaptarnos a un entorno de gran incertidumbre, ya que “cambiaremos de empleo de 12 a 14 veces a lo largo de nuestra vida profesional. Además, 3 de 4 alumnos de educación infantil trabajarán en ocupaciones que todavía no existen”. En consecuencia, las instituciones educativas han de fijarse como tarea esencial la de “ayudar a sus estudiantes a gestionar los cambios, potenciando habilidades superiores como la creatividad, la empatía, la capacidad de innovar y de pensar críticamente. La memorización ya no será tan necesaria, puesto que habremos de huir de las tareas rutinarias hacia un conocimiento más holístico. Todo lo que tenga que ver con la creatividad va a estar en el centro”.

Postura UPyD-Asturias ante Debate sobre Estado de la Región

“Un gobierno en retirada”

Un gobierno no puede utilizar la táctica ventajista de apropiarse de los aspectos positivos de la evolución económica y buscar estrategias para explicar las negativas o achacarlas a efectos externos o ajenos a su labor

Los principales ejes de comunicación asturianos siguen inacabados y sin visos de poder realizarse en el corto plazo, así como la mayor parte de las infraestructuras prometidas y consideradas estructurales para el despegue siguen pendientes de su finalización y con dudas sobre su viabilidad

En el cambio en la estructura económica asturiana y la realidad empresarial, la influencia ha sido más bien nula, cuajada de fracasos y escándalos, y en algunos aspectos (como las subvenciones y ayudas empresariales, o las medidas fiscales) ha sido negativa

La despreocupación en tomar verdaderas medidas de austeridad, garantizan que no existe ni un plan ni un proyecto para salir de la crisis

Jamás en esta década ha habido una actuación coordinada entre Administraciones Públicas sobre la base de un orden lógico de prioridades pensando en el ciudadano. Sólo han primado intereses políticos, necesidades clientelares y peleas partidistas

Un gobierno socialista en franca retirada se niega a tomar las decisiones necesarias, con la intención de diferir su responsabilidad en este fracaso al gobierno que ejecute las políticas tras las elecciones de mayo de 2011

Asturias debería haber acabado la primera década del Siglo XXI con los deberes hechos, y no lo ha conseguido

Tras el discurso del Presidente Areces en el debate de orientación política, UPyD en Asturias quiere declarar:

A lo largo de los últimos diez años el Gobierno socialista ha pintado un panorama idílico de la realidad asturiana. Sin embargo, el balance de una etapa de gobierno no es equivalente al balance de la marcha de una economía: independientemente de que la coyuntura ofrezca buenos o malos resultados, un gobierno no puede utilizar la táctica ventajista de apropiarse de los aspectos positivos de la evolución económica y buscar estrategias para explicar las negativas o achacarlas a efectos externos o ajenos a su labor.

La situación de la economía asturiana en el SXXI es básicamente el fruto de los cambios estructurales operados en los 80 y 90, que cambian el rumbo de una economía muy industrializada y excesivamente dependiente de la gran industria pública. Esas decisiones no son responsabilidad del Gobierno socialista sino que tomaron forma en una estrategia dirigida desde el gobierno central. El hecho de que ahora contemos con una economía más diversificada, más capaz de reaccionar ante cambios de la envergadura que afrontamos, no es en absoluto un logro que el presidente Areces pueda conceder a su gobierno. Por el contrario, como resultado de diversas políticas y la bonanza económica, el gobierno asturiano ha dispuesto de numerosas transferencias y consumido ingentes cantidades de recursos públicos en la década más próspera de la historia reciente española, aprovechando el crecimiento económico de manera marginal y prometiendo resultados para el fin de la década. Una Asturias productora de energía, conectada a la Alta Velocidad, con un puerto marítimo para el siglo XXI y las conexiones por autovía finalizadas de este a oeste, han sido las principales promesas del gobierno socialista.
Hoy, esta década de oportunidades perdidas ha finalizado, y hoy Asturias se encuentra en una encrucijada. Los principales ejes de comunicación asturianos siguen inacabados y sin visos de poder realizarse en el corto plazo, así como la mayor parte de las infraestructuras prometidas y consideradas estructurales para el despegue siguen pendientes de su finalización y con dudas sobre su viabilidad, mientras el gasto corriente sigue aumentando con lo que nuestra capacidad de ahorro e inversión se reduce paulatinamente.

Nuestra realidad es que en aquello que forma parte de las competencias autonómicas, la gestión ha sido manifiestamente mejorable, y a todas luces requiere una urgente coordinación estatal, mientras que en el medio plazo se hace evidente la necesidad de una asunción de determinadas competencias por parte del gobierno central. Sobre la influencia del gobierno autonómico en el cambio en la estructura económica asturiana y la realidad empresarial, la influencia ha sido más bien nula, cuajada de fracasos y escándalos, y en algunos aspectos (como las subvenciones y ayudas empresariales, o las medidas fiscales) ha sido negativa.
La ausencia de medidas y la reiteración de fórmulas equivocadas parecen reflejar la negativa del gobierno asturiano a asumir el cambio de paradigma que ha traído la crisis. El cambio de rumbo que el gobierno socialista central efectuó en mayo de este año rompió los esquemas de muchos gobiernos autonómicos, que se encuentran inoperantes y sin respuesta que dar ante la crisis, una vez demostrado que el modelo de gasto incontrolado era catastrófico y suicida. La subida de impuestos (Asturias está entre las CCAA con mayor presión fiscal de España, lo que ejerce como barrera para la creación y actividad de empresas y profesionales) y la despreocupación en tomar verdaderas medidas de austeridad, garantizan que no existe ni un plan ni un proyecto para salir de la crisis, en lo que es una profunda carencia de ideas con la que afrontar esta nueva situación.

A mayor abundamiento, la crisis o los escándalos judiciales han podido paralizar obras como la autovía ASIII, el túnel del Fito, el palacio de Justicia o el circuito Fernando Alonso. Sin embargo el gobierno autonómico ha sido incapaz de negociar adecuadamente con el gobierno central para que éste invirtiera por orden de prioridades (autovía del Cantábrico y AVE), al seguir introduciendo nuevos demandas que han perjudicado nuestra capacidad a la hora de cerrar proyectos (autovía La Espina, autovía a León, AVE del cantábrico, etc) pretendiendo apostar por el error hasta el final. Jamás en esta década ha habido una actuación coordinada entre Administraciones Públicas sobre la base de un orden lógico de prioridades pensando en el ciudadano. Sólo han primado intereses políticos, necesidades clientelares y peleas partidistas.

Sobre las cifras y las comparaciones, el gobierno juega con ellas y retuerce los datos, y ante una oposición incapaz de realizar el más mínimo análisis, la información que llega al ciudadano está completamente distorsionada. Asturias cae en la crisis en el tercer trimestre de 2008, mientras que la media de España ya empeora desde finales de 2007 o principios de 2008. Esto hace que los datos de España estén más deteriorados, e incluso que ante una comparativa 2007-2010 Asturias obtenga mejores resultados que la media española. Sin embargo lo realmente importante es ocultado, como es el valor absoluto de determinados parámetros (renta per cápita, tasa de actividad, etc.) o la acelerada velocidad de deterioro. Asturias está relativamente mejor en algunos datos (tasa de paro), pero el desempleo está creciendo comparativamente más rápido, y la cifra de ocupados o activos en relación a la población total es menor; el VAB, el PIB o la renta per cápita de Asturias está por debajo de la media nacional; los servicios públicos son los que están evitando una mayor caída del PIB, etc. Es preciso hacer una lectura real y no una lectura autocomplaciente, sólo porque nuestro Presidente quiera retirarse de la escena pública en una ficción interesada.

El gobierno socialista desoye el crecimiento espectacular de las cifras de paro y la huida de nuestros jóvenes, a quienes formamos con nuestros recursos, en busca de oportunidades que aquí se les niegan. El oriente y el occidente siguen perdiendo población año tras año, mientras el campo asturiano sigue buscando una solución entre la inacción de una administración que defiende el statu quo resignándose a una muerte lenta antes que a tomar las decisiones necesarias. La agravada situación de envejecimiento que se da en nuestra sociedad no obtiene más respuesta del gobierno asturiano que las promesas de aumentar las ayudas al desempleo.

Conclusión

Hoy, un gobierno socialista en franca retirada se niega a tomar las decisiones necesarias, con la intención de diferir su responsabilidad en este fracaso al gobierno que ejecute las políticas tras las elecciones de mayo de 2011. En el discurso socialista no se atisba ni la más mínima autocrítica, ni un reproche sobre la continua inauguración de proyectos que respondían, no a la rentabilidad económica, sino a meros intereses electorales. Proyectos que han puesto en peligro la competitividad de nuestra comunidad, proyectos que han ralentizado la finalización de aquellos verdaderamente importantes que podrían establecer una ventaja comparativa en esta crisis.

Asturias debería haber acabado la primera década del Siglo XXI con los deberes hechos, y no lo ha conseguido. Asturias por culpa de una clase política incapaz de plantear alternativas, sigue pendiente de una reconversión inacababa, acomplejada por su incapacidad para afrontar el futuro sin hacer pivotar su debate público en torno a la explotación de un recurso caduco y a una economía capturadora de subvenciones.

Nuestra sociedad requiere de un liderazgo nuevo que interprete la realidad asturiana y española como un modelo conjunto. Un liderazgo que confíe en las posibilidades de nuestro país y que trasmita a la sociedad las exigencias de sacrificio, responsabilidad y sentido de estado que se avecinan en el futuro. Que entienda que los jóvenes deben formar parte activa de nuestra sociedad y que los ejes tradicionales de la política asturiana: sindicatos, carbón, y gran obra pública, no son suficientes para afrontar los retos de este nuevo siglo.

Asturias requiere de una clase política que cumpla lo que dice, que no traicione la confianza de los asturianos por unos miles de votos, que piense en el interés general por encima de los compromisos clientelares y la tendencia al conservadurismo. Que recuperé la responsabilidad inherente a la acción de gobierno, no como el arte de contentar a todos, sino como la necesidad de tomar decisiones difíciles con la certeza de que son las decisiones correctas.


Consejo Territorial UPyD-Asturias

UPyD-Gijón presentó sus alegaciones al documento de aprobación inicial del PGO

24 de octubre de 2010

El documento de alegaciones presentado recoge en detalle las consecuencias irreversibles que puede sufrir una zona de especial riqueza natural y paisajística como es la de Granda/río Piles, si en ella se construyen los 58 bloques previstos en el documento de aprobación inicial correspondiente al Plan General de Ordenación 2010.

Coincidiendo en el día de ayer con la finalización del plazo fijado para la presentación de alegaciones al Plan General de Ordenación de Gijón, Unión Progreso y Democracia presentó su propio documento en relación con el nuevo área de suelo que quiere urbanizarse en la zona de Granda.

Desde UPyD-Gijón consideramos un auténtico despropósito la citada actuación por muchas razones que aparecen recogidas en la alegación presentada. La construcción de 58 bloques de viviendas de entre cuatro y cinco alturas en espacios que bordean el río Piles, de especial interés natural y paisajístico, no tiene ningún sentido salvo aquel que persiga beneficiar los intereses privados de las empresas constructoras que acometan las obras. La aberración que se pretende conseguir no cumple además con los requisitos básicos recogidos en la Estrategia Territorial Europea para el Medio Ambiente, según la cual, el modelo de ciudad que ha de perseguir cualquier planeamiento urbanístico es el de una ciudad compacta que no genere graves inconvenientes de dispersión y desorden en su organización, evitando cualquier impacto ambiental, segregación social o ineficiencia económica por sus elevados costes energéticos, consideraciones todas ellas que el Plan General que el Ayuntamiento presenta a los gijoneses desprecia, y del que la zona de Granda a la que aludimos en el documento de alegaciones es buen ejemplo.

Hay que resaltar además que la riqueza faunística y vegetal de la zona Granda/río Piles y la variedad de especies animales que en ella se encuentra no aparece recogida en su totalidad y extensión en el informe de Sostenibilidad Ambiental redactado por el propio ayuntamiento, lo cual resulta muy sospechoso, cosa que denunciamos desde UPyD.

Armando Fernández, candidato por UPyD

24/10/2010 00:00 / Maria Iglesias Gijón

El gijonés Armando Fernández Bartolomé se presentará como único aspirante, que opta a encabezar la lista de Unión Progreso y Democracia (UPyD) a la Alcaldía de Gijón. Las elecciones internas del Partido para elegir al candidato se celebrarán el próximo miércoles. Fernández nació en Gijón en el año 1958, en Cimadevilla, y es profesor de Filosofía en el Instituto de Enseñanza Secundaria Rosario de Acuña. Con esta candidatura, ya son cuatro los municipios en los que UPyD pugnará por obtener representación política (Gijón, Avilés, Oviedo y Siero). A pesar de que el programa marco por el que regirá su línea electoral está aún sin definir, Fernández apuesta por el diálogo con los colectivos y asociaciones vecinales de la ciudad con el objetivo de conocer sus necesidades. “Mi intención es poner la oreja, y atender a las solicitudes, bajo la premisa de ofrecer una regeneración democrática”, apostilló. Asimismo, UPyD ha programado una serie de actos públicos para presentar a afiliados y ciudadanos su proyecto político y sus ideas. La agrupación, liderada por Rosa Díez, aspira a consagrase como partido bisagra tras las elecciones municipales y autonómicas del próximo 29 de mayo.

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