La Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias (LOPS) introduce la profesión de Dietista-Nutricionista en el año 2003, consciente de la importancia de regular la profesión dentro de su ámbito natural, el sanitario, y de la calidad de la formación de los profesionales.
Esta ley, en lo que al Dietista-Nutricionista compete, supone la asunción en España de la tendencia actual definida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que se enfoca hacia el alcance del mayor potencial posible de salud, a lo largo de la vida de la persona, dando prioridad a la prevención y promoción frente a la curación. Una de las diversas estrategias para alcanzar dicha meta consiste en focalizar los esfuerzos en la mejora del sistema de Salud, especialmente en Atención Primaria.
Su intervención contribuye de forma eficaz y eficiente a la prevención, tratamiento y curación de los trastornos y enfermedades prevalentes. Tiene un papel básico en el manejo y detección de la malnutrición en los grupos vulnerables como infancia y adolescencia, grupo de mayores y personas dependientes, enfermas o en riesgo de exclusión social, y sus acciones son coste eficiente contribuyendo a la reducción del gasto sanitario.
