Sastre defiende la fusión de institutos y colegios para rentabilizar al profesorado

El presupuesto de Educación, de 825 millones, cae un 5,5% l La asignación a la Universidad es la única que crece, pero gracias al campus de excelencia 

 El consejero de Educación y Ciencia, Herminio Sastre, está dispuesto a sacar el máximo partido al profesorado asturiano, no tolerará que ningún trabajador genere «inflación» y entre las medidas que baraja para rentabilidad recursos está la fusión de centros educativos. «Queremos un sistema bien dotado, cada vez más eficiente», manifestó ayer, durante la presentación de los presupuestos de su Consejería para el año 2011, en la sede de la Presidencia del Principado. Fue entonces cuando se pronunció a favor de «la integración de centros» y señaló que está «comprobado que los centros mayores son los que mejor rendimiento y atención están obteniendo».

Sastre no piensa en términos de más o menos profesores, según dice. «Hay que tener los que el sistema necesite», sostiene, y por ejemplo adelantó que habrá que ir pensando en recolocar a los profesores de Formación Profesional de estudios que no son demandados. La consigna del consejero de Educación es «que no haya ni una, ni dos personas que causen inflación al sistema».

Lo que garantiza firmemente, al menos para el curso que viene, es el mantenimiento de la actual ratio de alumnos -los niños que tiene a su cuidado cada profesor-, que ahora es de 8,3. Afirma que está asegurada con la inversión en enseñanza no universitaria prevista en el Presupuesto de 2011 y que asciende a 643,5 millones. Dos terceras partes se las llevan los cursos de Infantil y Primaria, con 222,7 millones, y de Secundaria y Bachillerato, 218.

El presupuesto de la Consejería de Educación y Ciencia decrece en términos globales en un 5,5 por ciento respecto al del ejercicio que está a punto de acabar y se queda en 825,48 millones de euros. Además de los 643,5 para Educación Infantil, Primaria, Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional, incluye los 143,8 millones para la Universidad de Oviedo y otros 42 millones para I+D+I (investigación, desarrollo e innovación).

El presupuesto se contrae, explicó, por la rebaja salarial del funcionariado, que viene dada desde Madrid, y por los recortes en los gastos de personal y funcionamiento, aplicados por el Gobierno regional. «Hay obras que ya han finalizado y otras se han reprogramado, dentro de un presupuesto austero», detalló, y varios programas educativos que se suspenden, aunque puntualizó que esos ajustes «en ninguna medida afectan a lo básico». Se mantendrán, prometió, «los puntales básicos de un Gobierno socialista» y destacó que «el peso de la enseñanza en el gasto social del Principado representa el 31 por ciento, el segundo más importante tras la sanidad».

Sastre llamó la atención sobre el «aumento global» de un 4,5 por ciento del presupuesto de la Universidad de Oviedo. Admitió a continuación que buena parte de ese incremento corresponde al crédito del Campus de Excelencia y a los fondos mineros. «Son recursos que el Principado tiene que poner, aunque previamente haya un crédito», precisó en referencia a los primeros, y acerca de las quejas de los universitarios sobre la cortedad del presupuesto que se les reserva, se limitó a observar: «Todo el mundo pide más».

Herminio Sastre destacó algunas cifras: los 7,1 millones que se destinan a inversiones en la enseñanza no universitaria, los 4 millones para la compra de miniordenadores para las escuelas y el mantenimiento de todos los conciertos educativos, para los que se han reservado 47,7 millones. Sólo hubo una breve mención al plan de evaluación y los incentivos al profesorado, y fue para negar que se esté retrasando por la falta de fondos.