Aunque la opinión pública centre la mayor parte de la información en el asunto de las cesantias eso no es lo mas grave que está sucediendo en la esclerotizada vida parlamentaria asturiana sino todo lo relacionado con el esencial “ius in officium” de los parlamentarios porque la libertad es la sangre del parlamentarismo
La Junta General del Principado de Asturias, y con una vuelta de tuerca en el nuevo Reglamento , sígue la misma estela de todas las instituciones representativas de nuestro país, concediendo un protagonismo absoluto a las direcciones y portavocías de los Grupos Parlamentarios . por ejemplo:
se necesita la firma del portavoz para solicitar determinados tipos de información. La firma de papá o de mamá.
o el derecho a pertenecer solo a una Comisión, y no de las esenciales,...si te portas mal castigado contra la pared a la comisión de Peticiones...por ejemplo
… se limita su posibilidad de presentarse libremente a los cargos de la Mesa. ......"lo que diga el partido"
no tienes derecho a conocer las cuentas de tu grupo parlamentario……por el que estas poniendo la cara......etc.
Esta dinámica funcional relega al Diputado a un papel secundario, por no decir marginal, que en la práctica supone una limitación al ejercicio del propio derecho del representante y por lo tanto al ejercicio del derecho fundamental de participación política de los ciudadanos a los que representa CE art.23).
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